Los comerciantes de Hadú se han concentrado esta mañana a las puertas de la tienda ‘Le Coquette’ para denunciar el sentimiento de desamparo e indignación que sufren en Ceuta desde el comienzo de las obras pertenecientes a la reforma integral de la barriada en la avenida Teniente Coronel Gautier.
Según cuentan los comerciantes de Hadú de los distintos establecimientos, estos se han informado del comienzo de las obras gracias a medios como El Faro, “como cualquier otro ciudadano de la ciudad”.
Denuncian que “nadie se ha acercado para informarnos sobre el inicio de estas obras y en qué podría afectarnos”.
Pérdidas en establecimientos
Estos reclaman una mayor atención por parte de la Ciudad, sobre todo, a las cuestiones relacionadas con las pérdidas que los establecimientos puedan sufrir ocasionadas por las calles cortadas o los cortes de luz nacientes de la reforma integral de Hadú.
Salua Benaissa, dueña del establecimiento ‘Le Coquette’ y respaldada por un gran número de comerciantes, ha ejercido de portavoz para todos ellos.
Exigen información
Según cuenta Benaissa, toda la información de la que disponen “ha llegado a través de terceras personas”. “Sabemos que habrá subvenciones, sí, pero, ¿cuándo?, ¿de qué importe?, ¿qué requisitos hay que cumplir? La verdad es que nos preocupa bastante”.
Como ha indicado la portavoz, Hadú es el segundo centro de la ciudad, dispone de mercado, hay un gran número de empresarios que cada mañana deben levantar su persiana como sustento para sus hogares y estos denuncian que no existe una institución preocupada por su situación.
“Pagamos nuestros impuestos, queremos que cuenten con nosotros”, dice respecto al anhelo de una visita de la Ciudad local por local para anunciar el comienzo de obras y las medidas que se tomarán para la conservación de los negocios por las consecuencias negativas que estos puedan sufrir a consecuencia de las obras iniciadas en Hadú.
Respaldo
Este colectivo exige ser informado sobre las decisiones gubernamentales y el respaldo con el que cuentan desde la administración local.
“Los comerciantes que nos hemos reunido nos hemos dado cuenta de que no sabemos nada. Hemos visto en El Faro que comenzarían unas obras, que nos parece muy bien que arreglen la zona porque eso puede influir positivamente en las obras, pero, ¿cuánto va a durar?, ¿nos van a ayudar?”, relata Benaissa.
La portavoz de los empresarios de Hadú ha continuado mostrando el descontento general que se ha creado tras ver “unos planos digitales en los que se mostraría la colocación de bolardos en las aceras”.
Además, los vecinos han instado que no les gustaría que tras la reforma de la barriada, “Hadú se convirtiera en una zona fantasma como ha ocurrido con el Paseo de las Palmeras, Gran Vía o la Almadraba”.
Rotura de ventas
“Eso quieras o no rompe muchísimo las ventas ya que no contamos en la barriada con un parking o alguna facilidad para que la gente del exterior se mueva a Hadú”.
Este grupo exige que la Ciudad tome las medidas necesarias para informar a los comerciantes sobre las decisiones que competen a las obras de la reforma integral de la barriada y, por ende, de aquellas que afectarán a los negocios.
Según Benaissa, desde el comienzo de estas obras ya es notable la reducción de visitantes por la zona, afectando directamente a las ventas y beneficios de los empresarios.
Indignación
“Ya de por sí las ventas estaban un poco flojas, imagínate cuando las obras se acerquen más a esta zona -dice refiriéndose al espacio donde se concentra un mayor número de negocios- y corten lo que tengan que cortar porque vuelvo a repetir que no sabemos nada”, transmite con gran indignación.
El grupo ha reiterado una y otra vez el absoluto desconocimiento respecto a la situación en la que quedan los negocios de Hadú tras el comienzo de las obras.
Los establecimientos están sufriendo ya las consecuencias del inicio de las obras, por ejemplo, en los cortes de luz. Según ha relatado la portavoz del grupo, durante una jornada, a pesar de que “pegaron carteles anunciando del corte de luz”, muchos establecimientos que no lograron percatarse de ellos tuvieron que esperar “hasta las 16:00 horas para poder cerrar las persianas de sus negocios”.
Hadú, abandonada
“Hadú está totalmente abandonada, nadie nos representa, nadie nos informa, pero luego llegan los trimestrales y hay que pagarlos, así como el alquiler, la luz, las tasas de la seguridad sociales, a los trabajadores asalariados. Para recoger dinero existimos, pero para lo demás, nadie cuenta con nosotros”, expresa con cierto enfado Benaissa.
Desamparados es como se sienten, así lo han expresado y así lo cuentan. Todos ellos exigen que “si se va a dar comienzo a unas obras, que ya se han dado”, se brinde ayuda y existe apoyo por parte de la Ciudad.
“Si yo no levanto esta persiana yo no como”, concluye Benaissa.
El surgir de planteamientos
Tras la finalización de la intervención de Benaissa, el grupo comenzó a discutir una serie de cuestiones que afectaban directamente a cada uno de los comerciantes.
La indignación iba en incremento entre el conjunto de empresarios. Entre las conversaciones, se planteó realizar un dossier con la contabilidad de los establecimientos meses anteriores al comienzo de la obra y, en contraste, presentar estos documentos con las cuentas recogidas durante esta a su finalización.
También se propuso la creación de una asociación de empresarios de Hadú para tramitar a través de ella todas las gestiones y cuestiones que competan a estos establecimientos que sobreviven a las grandes superficies gracias a la entrega de los vecinos emprendedores.
Representación variada
Tiendas de ropa, farmacias, peluquerías, estancos, calzado, joyerías, boutiques de ropa árabe, tienda de golosinas, bazares, entre otros, han sido los distintos tipos de establecimientos que han tenido representación esta mañana durante la concentración.
Este grupo de comerciantes ha mostrado un gran descontento e indignación por la situación en la que se han visto envueltos tras el comienzo no anunciado de las obras que forman parte de la reforma integral de la barriada, así como el sentimiento de desamparo general.